Manejo de los cólicos en los conejos


 Manejo de los cólicos en los conejos

Conocido también como para intestinal, el cólico en los conejos es el funcionamiento irregular del sistema digestivo, ya que la comida se fermenta al interior de los animales, causándoles gases y deshidratación. Estos no dejan que el agua ni los nutrientes sigan su recorrido normal.

La muerte ocurre por la descomposición interna del alimento que favorece la reproducción de una bacteria conocida como Clostridium o una afección del hígado buscando eliminar dicha toxina. Son señales de alerta que el conejo no realiza deposición de heces que estas disminuyan de tamaño o que aparezcan cubiertas de moco amarillento, diarreas y temperaturas rectales de menos de 38 grados o mayores de 40, lo que indica hipotermia o fiebre.

Los cólicos suelen ser consecuencia de la falta de fibra en el alimento, el exceso de almidón o hidratos de carbono, problemas en la dentadura u otra enfermedad que les origine dolor o estrés. De acuerdo a la experiencia de Miriam, la causa más común es la humedad en los pastos o el suministro de algunas hierbas que son tóxicas.

Respecto a algunas hortalizas, como las zanahorias que se pudren rápidamente, tienen abundancia en carbohidratos y escasez de fibra, generan déficit nutricional y por el exceso de azúcares pueden hacer daño en órganos como el hígado e intestinos del animal. Aunque la recomendación ideal es que de aparecer los síntomas antes mencionados, los conejos sean medicados por un veterinario.

No se recomienda suministrar medicamentos que faciliten la digestión debido a que pueden agravar los síntomas. Así, el secreto para evitar los cólicos está en el suministro correcto de la alimentación e incluso puede ser suplementar con concentrado o caña de azúcar picada en pequeños trozos. El conejo consume más alimento en la noche que en el día, y el agua debe permanecer a voluntad y siempre fresca.

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